El papa Francisco pidió este domingo «moderación y diálogo» ante las «graves tensiones» en Jerusalén, donde en las últimas horas murieron ocho personas en medio de una nueva ola de violencia en la región.
«Sigo con conmoción las graves tensiones y la violencia de los últimos días en Jerusalén. Siento la necesidad de expresar un sentido llamado a la moderación y el diálogo», aseguró el Pontífice durante el tradicional Ángelus de este domingo ante miles de fieles en Plaza San Pedro.
«Los invito a unirse a mí en la oración, para que el Señor inspire a todos intenciones de reconciliación y paz», agregó Jorge Bergoglio.
Las palabras del Pontífice se dieron mientras se conocía en los medios italianos la muerte de la quinta víctima palestina de las últimas horas, un joven de 17 años que falleció tras ser herido en un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad israelíes en Cisjordania, en una nueva escalada de tensión en ese territorio y Jerusalén Oriental, en protesta por el refuerzo de los controles de Israel para ingresar a la Explanada de las Mezquitas.
El incidente se dio en una nueva jornada de violencia en la región, que durante los enfrentamientos de las últimas horas dejó un saldo de cinco palestinos muertos y alrededor de 450 heridos.
El lunes, en tanto, se reunirá el Consejo de Seguridad de la ONU para analizar la escalada de las tensiones en la región.